Un Árbol con Camino

En el caminar de nuestras vidas siempre que emprendemos un viaje por largo o corto que sea, por corta o larga la distancia que recorramos, es muy probable que nos encontraremos con situaciones muy peculiares e incluso sorprendentes.  Quién por ejemplo en alguno de sus viajes no pudo apreciar algún fenómeno natural como arcoiris, montañas con formas extrañas, formaciones de nubes con figuras graciosas, alguna que otra pradera con multitud de colores, personas con atuendos extraños, animales raros o graciosos, etc. y un millón de etcéteras más.

      Pues, refiriéndome a las cosas extrañas que uno se encuentra por los caminos de la vida, estaba viendo entre mi baúl de fotos digitales, una que nos sorprendió a mis compañeros de viaje y a mí, por la extraña curiosidad que presenta una fotografía que tomé por un camino rumbo al Volcán de Pacaya en  nuestra querida Guatemala, muchos chapines conocerán dicho volcán, aunque la senda por donde tomé esa peculiar fotografía no es la ruta común del grueso de turistas que visitan el coloso que vomita materias incandescentes desde el interior de la Tierra.  La foto en cuestión se las pongo a continuación......

       Aunque los colores están un poco pobres por el día tan nublado que tuvimos esa ocasión, puede ilustrar perfectamente el título que le dí al post "Un Árbol con Camino" y es que la verdad en mi vida había visto escena similar en paraje alguno de los que he recorrido (que no han sido pocos).  Los compañeros con los que caminaba en esa ocasión son miembros de la Asociación de Montañismo y Andinismo de Guatemala y para ilustrar el camino, uno de ellos caminó posó en el árbol y darle más enfoque al camino que tiene el árbol formado naturalmente y que en su parte final se forma una especie de mirador hacia una de las laderas del Cerro Grande (contiguo al volcán de Pacaya). 

     Esas experiencias por las montañas de Chapinlandia siempre quedan por ahí bien guardaditas en los recuerdos y son difíciles de olvidar por las caracteríticas tan especiales que tienen.  Muchos habrán vivido escenas similares en sus viajes, eso es muy seguro, yo al menos disfruté y disfruto aún con esa fotografía que tengo en gran estima por sus cualidades tan especiales.

   Espero que les haya parecido interesante la fotografía.  Saludos.

Escenas inolvidables del cine (II)

      Desde siempre he dicho que el cine es una de mis pasiones, y creo que nunca dejará de serlo. Las películas que uno ha visto y que tienen un lugar en los recuerdos, son muchas veces, fragmentos de las mismas que nos hacen recordar la película en su extensión.

     Muchas veces, en la vida cotidiana nos enfrentamos a situaciones que desempolvan recuerdos vividos a través del cine, como alguna vez nos ha pasado a todos, eso es bastante común, por ejemplo, cuando vemos una escena en la calle y es muy parecida a aquella escena de una vieja película que vimos hace algún tiempo y que hasta creíamos olvidada, pero de repente, Zas! vuelve a estar presente y se hace casi real cuando la comparamos con la escena vivida.

      En la escena particular del día, les pondre un fragmento de una de las mejores películas de terror, por sus buenas cualidades de mover del asiento al espectador, ya que a mi me pasó en mi infancia cuando pude verla y realmente esa película me marcó, tiene todas las verdaderas y suficientes características de una película de terror, hace creer que eso en realidad puede pasar y creo que eso es muy bueno para el propósito de la misma, aterrorizar, jejejeje ! Me refiero a "El Exorcista". Quien en los años 80's no vió esa película y se impactó ?? verdad que es una buena película? Y especialmente la escena que impacta (al menos por aquellos dorados tiempos) es cuando la pequeña Linda Blair gira la cabeza estando poseída por el dichoso demonio que la azota.  Una escena para recordar y creo que quien la vió en su tiempos de apogeo, no podrá olvidarla.

Espero sus comentarios y vean la escena inolvidable a continuación.....

Misterio de la construcción de las Pirámides

Ese misterio de la construcción de las pirámides......

Traducción libre de Juan Pacheco....

tomado de ..... http://www.uv.es/%7Ejaguilar/humor/b11.jpg

El Plebeyo

El amor siendo humano tiene algo de divino, amar no es un delito porque hasta Dios amó y si el cariño es puro y el deseo sincero Por qué robarme quieren la fe del corazón?

El anterior,  es un trozo de la letra de un vals del maestro Felipe Pinglo Alva, un peruano autor de muchas canciones, nos regala una letra que es legendaria, cantada en muchas maneras y en muchos estilos, desde el vals original que el escribiría, pasando por blues, bolero, incluso en danzón y salsa. Esta canción es una historia sobre un tipo de clase baja que se enamora de una mujer de la aristocracia. Y de uso poco común en canciones, el tipo tiene nombre propio, se llama "Luis Enrique" un plebeyo, laborante común y la chica de la alta sociedad.

En la red estuve investigando un poco y parece que es una canción un tanto autobiográfica, porque representa un romance perdido por el propio Pinglo con la bella hija de un industrial italiano afincado en Perú entre 1921 y 1923 (la canción se estrena en 1930). Resulta que la hija del industrial correspondía el amor del bohemio, pero sus padres se dieron cuenta de ello y al no estar de acuerdo en que su hija tuviera relación con un tipo de baja sociedad, la enviaron con sus abuelos a Florencia. La mala nota de siempre en las historias de amor fallidas.

La historia es universal, muchos casos de esos habrán por el mundo, incluso se han hecho tantas novelas y películas donde se presenta esa diferencia de clases y hay ejemplos desde romances adolescentes, hasta caricaturas, telenovelas, etc., etc.

Les dejaré como siempre un videito para que disfruten la canción interpretada por una de mis voces favorita, el señor Pedro Infante, con un arreglo de violines muy bonito y con el coro que inicia la canción de muy buena manera, que luego al entrar Pedro infante le da un giro totalmente distinto a la canción con esa voz profunda que se mandaba.

Saludos y espero que les guste la canción.

Título: El Plebeyo

Letra: Felipe Pinglo Alva

Intérprete: Pedro Infante

La noche cubre ya con su negro crespón
de la ciudad las calles que cruza la gente con pausada acción.
La luz artificial con débil proyección
propicia la penumbra que esconde en su sombra venganza y traición.


Después de laborar, vuelve a su humilde hogar
Luis Enrique, el plebeyo, el hijo del pueblo, el hombre que supo amar.
Y que sufriendo está esta infamante ley
de amar a una aristócrata siendo plebeyo él.
Y que sufriendo está esta infamante ley
de amar a una aristócrata siendo plebeyo él.


Trémulo de emoción, dice así en su canción:
El amor, siendo humano tiene algo de divino,
amar no es un delito porque hasta Dios amó
Y si el cariño es puro y el deseo es sincero
¿Por qué robarnos quieren la fe del corazón?

Mi sangre aunque plebeya, también tiñe de rojo
el alma en que se anida mi incomparable amor.
ella de noble cuna y yo humilde plebeyo,
no es distinta la sangre ni es otro el corazón.
¡Señor por qué los seres no son de igual valor!...

Escenas inolvidables del cine (I)

Una de mis pasiones siempre ha sido el cine. Estar en una sala de cine es una experiencia por demás entretenida, divertida, alegre, aunque el tema de la película no sea tan alegre, sino que, el estar disfrutando un buen largometraje es bueno para olvidar un poco las penas que el diario vivir nos regala. A veces, las películas que vemos, tienen mucho que ver con las modas comerciales, ya sea de superhéroes nuevos o antiguos, de personajes ficticios que realizan proezas o se le plantan a las fuerzas del mal para defender al mundo de la injusticia, etc, etc. Pero a veces las historias no necesariamente son de héroes o heroínas que salvan al mundo, sino que simplemente son reflejos o cuadros de la existencia de algún personaje con el que hasta podemos sentirnos identificados de alguna manera por ser un tipo/tipa tan común como nosotros mismos y que vemos en su vida reflejada en el metraje, algo quizá de lo que nosotros también padecemos o tenemos como característica propia. Eso creo que a veces le da un valor agregado a las películas, por ser historias comunes, pero también a veces son por el contrario personajes que sobresalen por su manera peculiar de decir o hacer las cosas.

Hace unos días recordaba una película muy buena que la protagoniza el señor Al Pacino junto a Chris O'Donnell, donde el primero es un coronel retirado y el segundo es un estudiante becado en uno de esos colegios de abolengo en USA, y que consigue como trabajo vigilar al coronel que está ciego y que tiene una manera muy distinta de encarar la vida y quien le da al patojo unas verdaderas lecciones de honor e incluso un poco de actitud hacia con la vida que el patojo está empezando a vivir.

En medio de la película hay una escena muy buena donde Al Pacino y O'Donnell están en un restaurante. El coronel saca a bailar a una chica que espera a su novio en otra mesa, luego , la banda del restaurante inicia a tocar un tango, muy pero muy bonito, que se llama "Por una cabeza" sin ninguna vocalización, pero en una ejecución de cuerdas muy bonita a cargo realmente de la banda "The Tango Project".

Al Pacino baila con esta chica que está muy linda por cierto, aunque por ser Al Pacino tampoco podemos decir que sea un excelente bailador de tango, pero Al Pacino es Al Pacino y su sola presencia pesa en la escena. Además las palmas en este caso se las lleva el grupo que ejecuta la hermosa pieza.

Les dejaré como siempre el disfrute audiovisual en el siguiente video y espero que lo disfruten.

Saludos y que estén muy bien.