VOLVEMOS A CAER EN DESGRACIA

En Guatemala, las autoridades y cuerpos de rescate en labores titánicas aunque sin planificación.

En los anteriores días en nuestro país, se ha visto cómo las lluvias han saturado los suelos y por ende han generado derrumbes, deslaves, hundimientos, aludes, desbordamiento de ríos, colapso de puentes, destrucción parcial o total de carreteras y otro sinfín de problemas que sumados a los problemas de tránsito, crisis económica, una inminente recesión mundial que muchos expertos auguran será de iguales o peores consecuencias a la depresión mundial de 1929, ponen por enésima vez en jaque al estado guatemalteco y a la sociedad en general por el colapso de las vías principales y por ello, la logística se ve afectada dando paso al incremento de precios muchas veces injustificados, acaparamiento de insumos, especulación y demás problemas conexos.  Y por otra parte, las autoridades están haciendo su mejor esfuerzo (en algunos casos) por paliar la situación caótica que se está viviendo en muchas áreas, principalmente las marginales que son las que están en constante riesgo por su precaria situación tanto económica como geográfica. Pero en realidad eso de andar tapando baches, rescatando cadáveres, remover escombros, reparar tramos de carretera, montar centros de acopio y otro montón de etcéteras más, se suman a los graves problemas de planificación y previsión que tienen los ministerios encargados de organizar territorialmente el país tanto la Secretaría de Planificación como el Ministerio de Comunicaciones, incluido también el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, así como la CONRED que realmente no tienen dentro de sus planes, el mantener un sistema de vigilancia y prevención que pueda evitar desgracias como las que hemos visto esto días.

Obras públicas fallidas por compadrazgo y corrupción

El ministerio de comunicaciones tiene unas deudas astronómicas con los contratistas de obras que en general son compadres a los que se les adjudican de manera truculenta (aunque en los papeles parecieran legales) muchos tramos carreteros, puentes, etc, que si se diera a la tarea una comisión imparcial de revisión podrían llenar todas las cárceles de este país con contratistas que entregan obras de malísima calidad, con factores de seguridad por debajo de los límites permitidos, calles sin señalizar, puentes que no soportan las cargas estáticas ni dinámicas que deberían, así como los estudios del terreno y su entorno para llevar a cabo una construcción son nulos porque lo único que esperan es terminar la obra antes que inicie el invierno y cuando este llega, esa obra colapsa por la falta de los mínimos requerimientos de seguridad. Todas estas observaciones no son ocurrencias mías ni caprichos al escribir, sino que son situaciones evidentes y que para nadie son secreto, sino vean muchas de las calles que después del Agatha se reconstruyeron, ahora están nuevamente colapsadas, también algunos puentes que por suerte han resistido muchos años no han sido sujetos a revisión por un ente de construcción certificado y que cumpla su labor para poder arreglar problemas durante una etapa preventiva.  Porque si se previene, se evitan consecuencias mayores. Tampoco podemos pedir cero incidentes por los fenómenos climáticos, eso es imposible, ni en países bien preparados y con mejor tecnología y recursos pasa eso, pero bien, si se planifica y se prevén muchos de los problemas que ahora vemos, se podrían salvar muchas vidas, ahorrar en costos de reconstrucción y la economía en general no estaría tan debilitada y los servicios de emergencia tendrían menores problemas.

Ordenamiento territorial prácticamente nulo en Guatemala

A todo ellos sumemos la falta de planificación de las contrucciones de obra civil, mucha gente que construye cerca o casi dentro de la cuenca de ríos, probablemente tendrán problemas cuando exista una crecida del río.  Escuchaba a un expositor en un cursillo sobre ordenamiento territorial que una señora les decía a ellos después que una tormenta inundó totalmente su casa: "Fíjese ingeniero que el río se metió a mi casa" y el Ingeniero nos dijo en tono un poco tragicómico: "Y yo le dije: No Señora, el río no se metió a su casa; usted se metió al río", y pues con esta anécdota podemos ejemplificar muchos de los casos en donde los ríos toman siempre sus cauces naturales y en las crecidas arrasan con todo a su paso y la gente se extraña porque su casa estaba a 5 mts del río cuando algunos expertos aseguran que no se debe construir a menos de 100 o 150 mts. de un río y aún así se debe evaluar hacerlo aún más lejos dependiendo la topografía del lugar. Pero si analizamos a fondo el problema, mucha gente construye donde logró comprar un su terrenito que por barato o por la cercanía al río lo ven como una bendición pero en casos como los antes citados pueden convertirse en pesadilla y esa es la realidad de muchas familias e incluso podemos hablar de colonias residenciales completas que están a la orilla o muy cerca de la cuenca de río e incluso el río atraviesa dichos lugares y esto como consecuencia de la falta de ordenamiento y planificación territorial desde las municipalidades que no titubean en aprobar proyectos habitacionales sin el debido estudio de impacto ambiental y de ubicación, solamente con saber que van a percibir más recaudación por medio del IUSI, aprueban cuanta colonia se solicite y luego no saben que hacer con tanto problema y quieren luego achacarle los problemas al gobierno central siendo ellos los principales responsables.

En Guatemala son comunes las construcciones riesgosas y sin supervisión.

A final de cuentas, estamos en una situación que si bien no se repite cada año, si pasa con frecuencia, acordémonos del Mitch, luego Stan, seguido de Agatha y ahora esta tormenta o depresión tropical 12E que nos afectó y nos sigue afectando gravemente y que pone al desnudo nuestras carencias en planificación y en modelos de respuesta y recuperación, estamos como siempre esperando que vengan organismos internacionales a ayudarnos, a endeudar más al país con los préstamos millonarios para paliar (no sanar) la crisis por el desastre y encima de todo, esos millones quizá un porcentaje que me atrevo a decir no llegue ni a 50% (quizás ni a 30%) será efectivamente para ayudar a los damnificados y a la reconstrucción de nuestra ya golpeada nación y el resto (50%-70%) será para los bolsillos de funcionarios corruptos que hacen su agosto con las ayudas y préstamos del extranjero y los problemas se siguen agravando y ellos engordando su cuenta bancaria en las islas Caimán o en Suiza.

Corrupción y malos manejos de fondos del estado

No nos queda más que mantenernos cautos al transitar y reflexionar sobre todo esto, porque la lluvia continúa y pueden agravarse los problemas que ya son graves.

Les dejo un video impactante de una carretera que colapsó y de paso se llevó a una pareja que luego fueron encontrados río abajo muertos. Lamentable !

Video de una carretera colapsada que arrastra a dos personas

Ojalá que nuestras autoridades inicien un plan a medio y largo plazo para prever futuros problemas porque no importa como se llame el fenómeno que nos aceche, siempre nos ha puesto en desgracia.

Saludos !

Cuando el dinero ya no tenga sentido ni valor

Las sociedades consumistas de nuestra era se han reventado el alma en su loca carrera por tener y por ofrecer la mayor cantidad de productos al mundo, lo que ellos no se detienen a pensar por un momento es que todos los insumos para fabricar los TV's, DVD's, celulares, computadoras, fast food y como mil etceteras mas, estan en un descenso de disponibilidad que parece que todo el mundo sabe pero no quiere ponerle atención. Uno de los casos más importantes y hasta un premio le mereció a Al Gore (vaya que merecimiento para alguien que tuvo poco respeto por la vida y por el ambiente en Vietnam) por el asunto de la tala de árboles que trae consigo innumerables problemas como falta de agua, cambios climáticos, cambios en la cultura y agricultura de la gente, etc.

Todo este sistema de consumismo sin medida está llevando a todo el mundo a un estado donde todas las posesiones materiales y todo lo que se haya acaparado sera innecesario cuando los problemas ambientales nos estén cayendo encima.

En nuestros pueblos antes nos enseñaban que uno se comía algo sin dejar nada de restos más que los inservibles, pero ahora los niños por la supuesta sobreabundancia de productos, se pueden dar el lujo de morder un alimento, desempacar otro, romper el envoltorio en algún otro, para luego comer sólo un poco y el resto dejarlo porque ya no quiere o simplemente porque eso se esta volviendo una moda copiada de nuestros verdugos imperialistas gringos, que todo les abunda, pero que no se detienen a pensar que todo está relacionado con los escasos insumos para fabricar esto o aquello. Para la fabricación de muchos productos se necesitan fuentes energéticas como el petróleo (en constante agotamiento de reservas), carbón, otros minerales que llegará un momento que simplemente ya no existirán y pues, ahí es donde empezaran a verse los verdaderos problemas.

La fase de ahorro forzado será la que forme la nueva cultura y toda esa estructura consumista y el movimiento de masas de dinero ya no sera lo que actualmente es, todos tendremos que forzarnos a mantener un esquema cultural basado en la escasez y sucederá como cuando hay un problema con el suministro de agua en alguna localidad por cualquier motivo, la gente empieza a ver cómo ahorra la poca agua que quedó en recipientes tales como depósitos, cisternas, etc. Y ese esquema se volverá una cultura global al momento de que no solo falte agua, sino también energéticos y muchos otros insumos con los cuales se elaboran muchos productos que hasta se han convertido en pseudonecesidades creadas por el consumismo.

Lo mas difícil de todo ello y quiza la parte medular del problema es que por el momento el planeta ha logrado soportar el embate de nuestra actitud despreocupada por pisotear cualquier fuente de recursos naturales iniciando con el simple hecho de tirar a la calle un envoltorio plástico, hasta niveles mayores en las compañias transnacionales que destruyen comunidades enteras por actividades mineras, industriales y agroindustriales.

"CUANDO SE TALE EL ÚLTIMO ÁRBOL,
CUANDO SE TERMINE LA ÚLTIMA GOTA DE AGUA,
CUANDO SE MUERA EL ÚLTIMO ANIMAL,
EL HOMBRE SE DARA CUENTA...
QUE NO PUEDE COMERSE EL DINERO. "

Por todo ello cuando ya no tengamos recurso de donde explotar entonces, todo el dinero de que dispongamos no nos servirá de nada y empezaremos a ver cómo la misma naturaleza nos va a reclamar el haberla tratado de manera tan infame agotando hasta el último arbol, la última reserva de agua dulce, excavar hasta el último milímetro de una mina, convertir tierras fértiles en meros desiertos, hacer de un paraje todo una ciudad tapizada de concreto y seguir pensando que entre más edificios y de mayor altura se contruyan, más desarrollado será un pais, porque en esos gigantescos totems de acero y cemento solamente se puede vislumbrar el futuro como algo superficial que está llevando al mundo a un precipicio donde luego será dificil salir aún teniendo las bolsas llenas de yenes, dólares, euros o lo que sea. Esos momentos turbulentos se perfilan como en los sagrados libros de todas las religiones, un mero apocalipsis, donde habrá una justicia superior que nos pedirá cuentas de nuestro comportamiento.  Y según creo, la naturaleza será la que nos reclame ese maltrato que le hemos dado y la factura será tan grande que ni con todo el oro acumulado alcanzará para pagar nuestra obligada deuda con este acreedor implacable que nos cobrará todo y a todos.

Pero en esto quiza se pueda llegar a una conciencia global y entrar en un mundo de comunión, como el resurgir de una nueva sociedad donde ya no tengamos que preocuparnos porque hay otros pueblos que se dedican solamente a pensar en cómo generar y producir más, sino que, dedicarse como buenos vecinos a participar de las alegrías y tristezas del otro no como sucede en estos tiempos que todos quieren participar de nuestras tristezas ofreciéndonos un revolver económico para suicidarnos poco a poco.

Saludos y espero sus comentarios.