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jueves, 27 de mayo de 2010

EL QUE TIENE EL ORO PONE LAS REGLAS

En muchas ocasiones vemos como nuestros sueños de tener un mejor país, una mejor región y hasta un mejor mundo se ven frustados y caemos en la cuenta que todo lo que alguna vez soñamos es solamente eso, un sueño y a veces creemos que algún día toda la inmundicia que tiene este mundo se acabará por algún motivo milagroso.  Esa idea parece que la comparte mucha gente, casi la población completa de la Tierra, a excepción de los ultraricos que ya están pasando a ser una nueva especie, porque tienen sus propios clanes económicos y sociales cual si fueran clubes exclusivos donde el resto de la población solamente son sus consumidores. Tal es el caso de los poderosos detrás de los gobiernos más grandes del mundo, porque si alguien pregunta: Quién es el hombre más poderoso sobre la Tierra ?  Pues la respuesta creo que apuntaría en el porcentaje mayor hacia el negrito que comanda a los Estados Amontonados de América, si, Barack Obama, ese títere de color Guayacán que gobierna y desgobierna esa potencia mundial que es casi omnipresente en todo el orbe, por sus polícas públicas de expansionismo bélico y econo-bélico en lo que a petróleo, drogas y otros vainas que ellos utilizan  y consumen a escalas colosales y que usan como pretexto para meterse en lugares donde no han sido invitados.
El quid del asunto es que estos señores poderosos, no son los que vemos en la TV ni en internet haciendo declaraciones pacifistas o belicistas, sino que los que salen a mostrarse solamente son meros títeres de los verdaderamente poderosos que nunca salen en ningún medio, simplemente porque están  muy bien pasando en perfil bajo, incrementando más y más sus cuantiosas fortunas. Son prácticamente dueños de países enteros, de regiones incluso que están tan empobrecidas con las políticas económicas de sus gobernantes que resultan rindiendo cuentas directa o indirectamente a estos señores, dueños de toda la plata oro de este mundo, a veces sin siquiera sospecharlo nosotros mismos trabajamos para agrandar aún más las cuentas de los ultraricos, amos y señores de las potencias mundiales.

Una frase muy importante que aprendí hace algunos años en un curso sobre comercio electrónico, versaba sobre el poder y el dinero, el expositor no pudo haberlo dicho de mejor manera: "El que tiene el Oro pone las reglas" , proverbio hindú muy acertado y es que en un mundo de libremercado, los más poderosos siempre están tras la reducción de sus costos y aumentar las ganancias, eso lo sabe todo el mundo y no se necesita tener un doctorado en Economía o Finanzas para saberlo, porque en realidad esa manera de actuar es la que hace que estos señores amasen inmensas fortunas no importándoles si en el camino dejan aplastado un pueblo porque sus sicarios (ejércitos) fueron a pacificarlos, porque no les convenía su manera de actuar y ellos calificaron a través de sus sistemas de inteligencia (sabuesos) que ese pueblo no estaba actuando de una manera correcta (de acuerdo a sus retorcidos principios).

Pero si notamos bien los signos de los mercados en todo el mundo, los que en realidad tienen toda la plata u oro, son los que dicen qué se hace y cómo se hace, tal es el caso de la reciente y aún tibia recesión que sufre EEUU, por el hecho de que se metieron a dar préstamos sin ninguna garantía, sobregiraron las casas financieras y eso les estalló en la cara a la mayoría (más no a los poderosos) que cómo vieron las ganancia a tope y escudándose en que se descapitalizaron sus megaempresas, pues le pidieron de favorcito al congreso de EEUU que les hiciera un pequeño préstamo regalo sin intereses y sin ningún pago en retorno, de la mínima y modesta cantidad de 700,000 millones de "dolores", una cifra que como bien diría mi viejo: "Si ese pisto lo llevaran en efectivo, harían falta un montón de camiones para llevarlo", jejeje, una reflexión simple pero directa y hasta un poco cómica.

Así que los poderosos aparte de que se llevaron la plata de todas las hipotecas que no pudieron pagar los gringos de a pié y todo el problema que esa burbuja económica acarreó, entiéndase: desaceleración del consumo y por ende de la producción, baja de la moneda, aumento del desempleo y muchos otros males conocidos por todo el mundo, también se llevaron el dinero del estado destinado para otros fines buenos o no pero que venían de los "taxes" pagados por todos los ciudadanos gringos.


Pero ahora también estamos viendo el mismo fenómeno y quizá a una escala mucho mayor en Europa con la reciente crisis que tiene Grecia, quien por estar maquillando sus estados financieros estatales para entrar en la colada de la Eurozona, se fué metiendo aún en mayores problemas y ahora con los precios disparados, la economía inestable, los trabajadores gritándoles en las calles y la economía tambaleando. Se dice que de este endeudamiento que ha tenido Grecia buena parte de culpa  la tienen los juegos Olímpicos del 2004 porque el gobierno de ese entonces quiso mostrar una cara muy reluciente de Atenas y sus alrededores pero con deudas hasta el tuétano y ese caso particular lo vemos muchas veces con personas que se endeudan para comprar algo que no trae ningún beneficio, como comprar un automóvil y quedarse apretado con los pagos y aún pagando alquiler de la casa o bien hipoteca y comiendo a veces menos de lo que debiera con tal de aparentar que tiene solvencia económica con la pantalla de las cosas materiales, pero el asunto de Grecia es un asunto que sólo está mostrando como se dice comúnmente: "la punta del iceberg" porque hay otras naciones como España, Portugal e Irlanda, que no están muy sanas económicamente hablando y hay otras en Europa que empezarán a mostrar la "pata de la que están cojeando". Y al final los poderosos serán los que salgan ganando de todo este asunto porque los pueblos seguiremos soportando y pagando los experimentos que hacen estos señores con el dinero que luego si lo pierden o dejan de ganarse un poco, sólo estiran la mano, llaman por teléfono al congreso/parlamento o lo que sea, para que les saque la pata del lodo.



Y la historia se volverá a repetir.  Los pobres más pobres y los ricos más ricos.